entreQuatre | 35 aniversario
16632
page-template-default,page,page-id-16632,ajax_fade,page_not_loaded,,vss_responsive_adv,qode-theme-ver-9.0,wpb-js-composer js-comp-ver-4.11.1,vc_responsive
 

35 Aniversario de entreQuatre

NOTAS AL PROGRAMA

La guitarra tiene bien merecido el apellido “española” que lleva casi desde sus comienzos: la práctica totalidad de los avances que conoció desde el Siglo XVI tuvieron lugar en España. Así, a las cuatro cuerdas dobles de la guitarra renacentista se le añadió en España una quinta, resultando el instrumento que hoy conocemos como guitarra barroca y que en la Italia de entonces llamaban ya “chitarra spagnola”.

En 1773, en Cádiz, publicó Antonio Vargas y Guzmán el primer libro para guitarra de seis ordenes (seis cuerdas dobles). Finalmente la guitarra asentó la afinación actual de seis cuerdas simples alrededor de 1805, naturalmente también en España. En cada una de estas fases decisivas la guitarra protagonizó innumerables éxodos y viajes a tierras muy alejadas; aún en nuestros días se está produciendo un fenómeno de asentamiento sin precedentes en Asia, particularmente en Japón. Pero es en Iberoamérica donde nuestro instrumento, en sus diferentes variedades históricas, se instala con asombrosa rapidez entre la música popular.

Es por eso que podremos encontrar con facilidad grandes similitudes entre un charango y una guitarra renacentista, pero nos resultará mucho más difícil hallar las diferencias entre una jarana mexicana y una guitarra barroca. Esta presencia de guitarras en la música popular de España, Portugal y la totalidad de Iberoamérica esconde un fascinante viaje de ida y vuelta: tras su periplo folclórico, iniciado hace ya cinco siglos, la guitarra trae consigo un enorme bagaje, tan variado como atractivo, que los compositores actuales de aquí y de allá, unas veces muy cerca de la tradición y otras no tanto, han sabido aprovechar. Por otra parte, los conjuntos de guitarras han sido una constante en la historia de la guitarra, ya sea en su faceta culta o en la popular, y las sonoridades de algunas de estas manifestaciones (Cuba, Colombia, México, etc.) son asimiladas como señas de identidad. EntreQuatre ha querido, dentro de su ámbito, recoger y continuar ese proceso, cargado ahora de nuevos sonidos.

La trayectoria de EntreQuatre, después de 20 años, destaca por su empeño en propiciar la creación de nuevas obras para cuarteto de guitarras, principalmente de compositores españoles e iberoamericanos; hasta la fecha EntreQuatre ha puesto en escena 47 estrenos y la casi totalidad de estas obras habla portugués o español. Mediante una cuidada selección de su repertorio, EntreQuatre presenta aquí un peculiar viaje sonoro por las tierras que han contemplado este largo peregrinaje de nuestra guitarra. El programa toma prestado, en plural, el título de una de las obras.

PROGRAMA

Música española e iberoamericana para 4 guitarras

Flores Chaviano (Cuba/España 1946)
Entrequatre* (1984)

F. Moreno-Torroba (España 1891-1982)
8 Estampas (1972)
     Bailando un Fandango Charro
     Remanso
     La siega
     Fiesta en el pueblo
     Amanecer
     La Boda
     Camino del Molino
     Juegos Infantiles

Sergio Assad (Brasil 1952)
Uarekena (1994)

Jose Luis Barroso (España 1960)
Preludio, Canción y Danza* (2003)

Leonardo Sánchez (Argentina 1966)
Itinerario* (suite Argentina) (2001)
     Norte (huayno)
     Oeste (tonada-cueca)
     Sur (milonga)
     Este-Final (candombe-malambo)

Miguel del Águila (Uruguay 1957)
Presto* (2000)

*Obras escritas para EntreQuatre

Captura de pantalla 2019-06-22 a las 22.47.38